viernes, 21 de octubre de 2011

TANDOORI STATION

Hola de nuevo.

Continuando con mi puesta en común de los sitios a los que voy a cenar, el pasado miércoles estivimos en el Restaurante TANDOORI STATION MADRID (Calle José Ortega y Gasset, 89, http://www.tandooristation.com/).

Si bien en la entrada anterior del blog no os recomendaba el sitio para cenar, este caso es más que recomendable. No se trata de un restaurante nuevo, pero es la primera vez que voy. La cuestión es que no habia tenido demasiada buena experiencia con anteriores Restaurantes Indios y tenía alguna prevención en contra de ellos, pero en esta ocasión la experiencia ha sido muy grata y repetible.

El servicio, desde el primer momento, es realmente bueno. Todo el personal (casi todo hindú) son muy amables, discretos y profesionales. El espacio entre las mesas es suficiente, de forma que los vecinos de mesa no tiene porqué enterarse de la conversación que mantienes; el entorno y decoración son agradables, la música es típica hindú pero no estridente y en su grado justo de volumen.

La primera vez que ves la carta te da la impresión de estar perdido, pero eso se arregla con la llegada del propietario del restaurante, que te asesora y guia de forma que las elecciones se ajusten a los gustos de los comensales.

Lo primero que hay que probar es la cerveza hindú, que te sorprende por su sabor fuerte, parecida a las nuestras. Luego, la cuestión es abrir la mente a los distintos sabores que te vas encontrando, sin despreciar nuevas presentaciones, colores y mezclas de texturas. Los que gusten de los sabores fuertes y picantes estarán en su medio.

En definitiva, una experiencia recomendable que nos salió a dos personas por unos 80 €.

Solo le falta alguna oferta o cupón para que la salida de la noche de los miércoles sea más a menudo de cocina hindú. Y, como se puede deducir de lo expuesto, fue una expediencia RECOMENDABLE que repetiremos.

Por otro lado, si alguno quiere dar su opinión de sus experiencias, estoy dispuesto a compartir este blog y publicar en él los comentarios que querais hacerme llegar.

Saludos y gracias por vuestra atención.

sábado, 8 de octubre de 2011

Presentación

Hola, soy nuevo en esto, por lo que pido disculpas por los errores que pueda cometer.

Mi (nuestra) intención es poner en común con la Comunidad lo que nos pasa en los Restaurantes de Madrid. Todos tenemos distintas ofertas para cenar; nos llegan desde todas partes (amigos, internet, mails, recomendaciones, páginas de descuentos) pero lo que te encuentras pocas veces tiene que ver con la publicidad, las fotografías y las opiniones que recoges.

Las recomendaciones de otros usuarios en páginas web, en la mayoría de los casos, son bienintencionadas, pero no te dan demasiada información sobre que es lo que te vas a encontrar en el restaurante al que has decidido ir a cenar con tu pareja y/o amigos.

Pongamos por caso el restaurante en el que mi pareja y yo cenamos ayer. El Restaurante Pantone (Calle López de Hoyos, 11- http://www.restaurantepantone.es/). Lo primero que hicimos fue reservar a través de una página web que nos daba un 40% de descuento sobre la carta. En la página web mostraban fotografías del restaurante, las recomendaciones y opiniones de los anteriores usuarios (algunas bastante recientes y con puntuaciones realmente altas - 9,3). Parecía que ibamos a tener una velada agradable y romantica en un restaurante vanguardista y moderno).

Pero lo que nos encontramos fue una entrada poco cuidada (escalones sucios y con colillas), un responsable vestido con un polo azul de dudoso gusto que nos tuteó desde el primer momento, la TV puesta (primero el futbol y luego cambiaron a Salvame), muy poco sitio entre las mesas (los camareros tropezaban con los manteles y menús), una carta justa, la cocina sin independizar (que produce ruidos y olores no deseables), y para ser justos una camarera con muchas ganas y realmente dispuesta a la atención al cliente (del otro camarero se puede prescindir, mejor que no te atienda). En cuanto a la comida, solamente comentar que es mejorable, tanto en la calidad de los platos como en la presentación de los mismos.

Es el típico sitio al que puedes ir a comer de menú a mediodía, cuando tienes que volver a trabajar, pero no con tu chica o pareja; no si quieres tener una cena romántica.

En definitiva, lo mejor de la velada fue la compañía de mi chica y lo agradable de su conversación y complicidad. La relación calidad precio fue buena, pero solo gracias al descuento obtenido. En el caso contrario, hubiera resultado a todas luces fuera de justificación el precio a cobrar (75€). NO VOLVEREMOS.

Por lo menos estaba cerca de los sitios nocturnos a los que nos gusta ir.

Gracias por vuestra atención.